¿Estás en la búsqueda de ideas o actividades para aprender el abecedario? ¿Necesitas hacer que practicar el trazo y sonido de las letras sea más divertida? Entonces esta pequeña guía es para ti. A continuación, te hablaremos de 8 formas distintas para que tus hijos aprendan el abecedario jugando, riendo e imaginando. ¿Quieres conocer más? Entonces continúa leyendo.
No importa cuántos libros sobre educación infantil hayas leído, posiblemente todos ellos te den una respuesta distinta a esta interrogante. La realidad es que no existe la “edad correcta o incorrecta” para que los niños aprendan las letras.
La mayoría de los niños comienzan a reconocer algunas letras entre los 2 y 3 años y pueden identificar la mayoría de ellas entre 4 y 5 años. Esto significa que puedes comenzar a enseñarle el abecedario a tu hijo cuando tenga alrededor de 2 años. Sin embargo, no esperes que lo domine por completo durante algún tiempo. Además, los niños pequeños aprenden de manera diferente a los niños mayores, así que no te desesperes y ten paciencia.
Recuerda que, todos los bebés aprenden el alfabeto y obtienen el hábito de lectura a diferentes ritmos. Además, es la infancia, no una carrera hacia la cima. Por lo tanto, ¡No te preocupes! Y no armes expectativas según la edad de un niño pequeño o sobre si ya se encuentra en edad preescolar. Con el paso del tiempo, el niño aprenderá de forma natural algunas letras. De hecho, (y como dato curioso) hace 30 años los niños eran enviados al preescolar para aprender el abecedario.
Así que, confía en ayudas visuales, como: tarjetas, legos, comida, juguetes y libros coloridos e ilustrados del abecedario; tu hijo se divertirá señalando las letras que conoce, así como los colores, las formas, los animales y otros objetos.
En lugar de inculcarles el abecedario, muéstrale al niño las letras; la clave estará en hacer que dichas letras formen parte de la vida cotidiana y permitan que tu hijo las reciba de una forma más natural. A continuación, te vamos a describir al menos 8 actividades para aprender el abecedario de forma rápida y divertida.
Hay muchas formas divertidas de presentarle a tu hijo letras individuales. Por ejemplo: Firma su nombre en su obra de arte, luego señala cada letra una por una. Con el tiempo, el infante tendrá la idea de que esas letras, juntas, representan su nombre. Puedes reforzar esta identificación de muchas formas como son:
Así es, un instrumento que lleva años en nuestra cultura de aprendizaje escolar puede ser de las mejores actividades para aprender el abecedario. ¡El gis para pintar sobre banquetas y piso de cemento en general siempre es un éxito! Escribir letras en el camino de entrada es una forma divertida de aprenderlas. Ahora bien, si tienes un área de tu casa donde puedas escribir en el suelo también funciona.
Escribe pares de letras, ya sean iguales (mayúsculas o minúsculas) o ambas, y haz que el niño o niña las empareje dibujando una línea entre las dos. Es una excelente manera para que los niños en edad preescolar reconozcan las letras. De hecho, lo ideal sería conversar con el infante sobre las letras que está conectando o preguntándole para qué letra está tratando de encontrar una coincidencia.
¿Recuerdas esos imanes de letras que solían estar en la nevera? Pues si tienes un infante en casa serán tus mejores aliados. ¡Usa todas esas letras para crear una carrera! Grítele con emoción que corra y agarre la letra ‘E’ y luego que regrese para que te la dé o para que la coloque sobre una mesa.
Repite este proceso con al menos 6 letras (para la primera sesión de aprendizaje). De hecho, esta actividad es excelente para el reconocimiento y la diversión cuando tus hijos tienen cualidades deportivas y competitivas.
¿A qué niño de dos o tres años no le gusta explorar? Utiliza esta técnica para hacer del aprendizaje de letras “un juego más”. Por ejemplo, puedes realizar la “búsqueda del tesoro con cuerdas“. Por lo tanto, tendrás que pasar un hilo alrededor de una habitación, o entre un ‘pasillo’ de sillas de comedor.
Sujeta letras a la cuerda para que las ‘encuentren’ en su camino a través del laberinto. Esta actividad es recomendable para hacer que letras minúsculas coincidan con letras mayúsculas cuando atraviesen el laberinto. Aunque, con tan solo hacer que digan las letras a medida que las encuentran también funciona.
Hacer laberintos es bastante fácil, solo necesitas un poco de cinta adhesiva (preferiblemente de color) en el suelo. Primero, comienza por crear caminos que hagan giros hacia adelante y hacia atrás hasta el final. Además, asegúrate de agregar giros que no vayan a ninguna parte.
Después, agrega letras para que los niños las sigan cuando vayan caminando por el laberinto y encuentren el camino final. A continuación te dejamos un ejemplo sencillo:
Crea un alfabeto completo pídele a tu hijo que siga una única letra (Por ejemplo: B, C, E, etc.) por todo el laberinto. Asegúrate de que los giros incorrectos sean a su vez letras incorrectas (Por ejemplo, D no viene después de A, pídele que vuelva atrás y comience de nuevo).
Simplemente jugando con legos, ya sean bloques de madera, legos convencionales, mega bloques etc. Los niños pueden usar esta técnica para aprender letras; tan solo debes asegurarte de pegarlas en cada lego que encuentres por casa.
De hecho, en el mercado puedes encontrar bloques que ya cuentan con números y letras. Sin embargo, si los tuyos no tienen esa cualidad, puedes imprimir hojas con las letras (varias de cada una) y simplemente juega con tu hijo de forma habitual. De hecho, verás que con el paso del tiempo aprenderán de forma natural a reconocerlas. Lo importante será que uses las letras en la conversación cuando estés construyendo con los legos.
Si tienes uno de esos tapetes ABC, ¡Utilízalo en pro del aprendizaje! Puedes hacer un juego con esta alfombra, o simplemente pídele a tu hijo que encuentre cada letra y que la ponga en orden alfabético. Por lo general, siempre es una buena idea juntar la parte exterior de las piezas del rompecabezas y llamar al infante para que encuentre las letras y así logre completarlas. Esta práctica tan “sencilla y cotidiana” puede hacer que el niño o niña reconozca las letras y mejore su capacidad de razonamiento.
Lleva el aprendizaje a la mesa de la cocina con refrigerios que tengan el alfabeto. Algunas ideas que podemos darte son:
Los niños que nacen con una excelente capacidad creativa disfrutarán de estas actividades. Crear “Arte” es una de las mejores actividades para aprender el abecedario en casa. No solo obtendrán una gran práctica, sino que también tendrán una obra de arte cuando hayan terminado. Puedes realizar diversas actividades como:
¿Qué te parecieron nuestras 8 actividades para aprender el abecedario en casa? Recuerda que, si esta guía fue útil para ti ¡No dudes en compartirla con otros padres! Si estás buscando más información sobre métodos de aprendizaje didáctico, no dudes en visitar nuestra web: Kidstudia.com
Recuerda que, el aprendizaje del abecedario no debe ser tomado como una preocupación; más bien puede ser una excelente oportunidad para fomentar el juego, la creatividad y la lectura en nuestros pequeños.